
Unos suculentos dividendos por derechos audiovisuales se han convertido en la piedra angular de este problema
El pasado 16 de octubre de 2019, parece que fue hace una vida, la RFEF asumió la organización de las competiciones organizadas hasta esa fecha por la Liga Nacional de Fútbol Sala creando, además, una subcomisión de clubes alegando la inexistencia del convenio de coordinación. Así mismo varios clubes, tanto de Primera como de Segunda División, instaron al estamento federativo a que retomen las competencias organizativas a la LNFS y prosiguiera las negociaciones y subscripción de un nuevo convenio de coordinación antes del 30 junio del 2020. La respuesta desde la Ciudad del Fútbol fue convocar tanto a estos 21 clubes como al resto que componen la Primera y Segunda división una reunión en enero que no hizo más que acrecentar el distanciamiento entre ambos estamentos y también entre los clubes.
Mientras la LNFS y la RFEF no lleguen a un acuerdo para firmar un convenio de coordinación o el CSD no la declare como profesional a ambas categorías, la competición será organizada y gestionada desde Las Rozas. La pasada semana la Real Federación Española de Fútbol comenzó a preparar la próxima temporada del fútbol sala español.
Pero hoy la Liga Nacional de Fútbol Sala ha celebrado una Asamblea Extraordinaria, en la que se ha aprobado por unanimidad la reforma parcial de los Estatutos, y otra Asamblea Ordinaria de clubes, en la que también se ha aprobado por unanimidad el reparto económico en concepto de los ingresos obtenidos por la explotación y comercialización de los derechos audiovisuales que asciende a 1.340.000€ para los clubes asociados en la temporada 2020/2021. Una cifra nada despreciable.
Presidida por Javier Lozano se explicaron la líneas estratégicas de los derechos audiovisuales de los clubes sujeto al contrato firmado con LaLigaSportsTV hasta 2023.“ La titularidad de los derechos audiovisuales es de los clubes. No ha habido ningún cambio jurídico tras el Real Decreto Ley 15/2020 de 21 de abril. Hay un contrato firmado hasta 2023 y se estudiará cualquier tipo de acción legal ante la posible ruptura del contrato”, indicó Sara Salvador, letrada de la LNFS. La LNFS cerró el ejercicio con un superávit de 240.000€.
Antes de concluir la Asamblea, los clubes asistentes mostraron por unanimidad, según el comunicado de la LNFS, su desacuerdo con la RFEF por el borrador del calendario elaborado y presentado por ésta de cara a la temporada 2020/2021, que tras asumir la organización de las competiciones no se ha contado con los clubes para su elaboración, quienes han acordado trasladar una propuesta común a la RFEF.